domingo, 9 de febrero de 2014

Capítulo 2- ¡Si eres tu!

-Narra Mabel:

Subí las escaleras y entré en mi pequeño universo, mi cuarto. Me tumbé boca arriba sobre la cama y suspiré y me estiré y mi mano chocó con el mástil de mi guitarra, que estaba apoyada verticalmente sobre la mesita de noche. Me incorporé y la cogí.

Mabel: Veamos... A ver si estás afinada...

Toqué una cuerda y me sonó horriblemente mal.

Mabel: ¡O por Dios! No.

Comencé a girar las cuerdas del extremo de la guitarra y probando a ver si sonaba bien, o al menos mejor. Cuando terminé, empecé a tocar unos acordes al azar y terminé por tocar Chasing cars de Snow Patrols:


Mabel: "We'll do it all... Everything... On our own". "We don't need... Anything... Or anyone..."

-Narra Ed:

Terminó de subir las escaleras y la perdí de vista, giré la cabeza y miré detenidamente toda la planta baja desde el sitio en el que estaba: Una buena decoración pero un tanto desordenada... Entonces, de una de las puertas de mi al rededor, salió un niño con la cara llena de, ¿Chocolate? Creo que era el chico que antes corría delante de la hija de Stuart.

Chico: Hola

Ed: Hola

Chico: ¿Quien eres?

Ed: Ed, trabajo con tu padre

Brian: Ah, bien... ¿Juegas a los Legos con migo?

Ed: Uuum... Vale.

El chico subió las escaleras y yo le seguí. Cada vez que subía un escalón, venía un sonido familiar a mis oídos, poco a poco más fuerte... Una guitarra. No le dí importancia pero a los pocos segundos escuché a alguien cantar a la melodía que hacía la guitarra... Y me gusto la voz, suave y natural. Al llegar a la planta de arriba, el chico me dirigió hasta su cuarto, pero en ese momento me quedé en mitad del pasillo mirando el suelo e intentando reconocer la canción interpretada.

Chico: ¿Vienes?

Ed: Oh... Eeem si.

Entré en la habitación llena de juguetes: muñecos de Toy Story, Legos, Playmovils y la pared de en frente del escritorio llena de papeles con garabatos de colores que representaban dinosaurios... Creo. Me señaló que me sentara en el suelo y accedí, abrió el armario y sacó una caja grande y roja con dificultad. Al parecer pesaba lo suyo. Se acercó a mi y volcó su interior justo en frente mía. Todo lleno de piezas de legos, muñecos e incluso, coches. 

Chico: ¿Hacemos una ciudad?

Ed: Vale

El chico empezó a hablar sobre como hacer una ciudad de lego o algo así. Pero yo  me centraba en escuchar la canción que aún seguía sin saber cual es aunque su sonido me resultara tremendamente familiar. Cuando empezamos a hacer una casa de legos, el chico empezó a moverse raro.

Chico: Olle me voy al baño que no aguanto...

Ed: Jejeje, vale...

Aún no sabía su nombre pero me contó en que clase estaba, quienes eran sus mejores amigos y yo seguía concentrado en la canción. Era muy sociable. Aproveché que el chico se fue y yo me salí de la habitación en busca del intérprete de la canción. Hasta que descubrí una puerta normal y corriente con una "M" con un oso detrás y una chica sobre caballo delante de la letra... "Buen dibujo", pensé. Abrí la puerta y la chica de antes estaba sobre la cama con la guitarra en su regazo. Al escuchar la puerta, alzó la mirada y me vio a mi y su cara pasó se un color natural a un rojo intenso.

Ed: Me gusta, ¿Como se llama la canción?

-Narra Mabel:

Me quedé en blanco cuando lo vi allí, y noté como mi cara se ponía roja. Lo miré fijamente con los ojos como platos sin saber que hacer... Era la primera persona en escucharme cantar, y no me gustó la experiencia. Quizá debería buscarme otro sueño...

Mabel: ...

Ed: Es que te escuché cantar desde el cuarto de tu hermano y pues...

Mabel: ...

Ed: Olle, ¿Estás bien? Si-si-si quieres me voy...

Después de que se me pasara el shock, agaché la mirada y me quedé mirando el lateral de la guitarra. No podía ser... Quería que esto fuera más adelante, cuando estuviera preparada... Pero NO tuvo que venir ahora... ¡¿POR QUÉ EL MUNDO ME ODIA?!

Mabel: E-e-eres la primera pe-pe-persona e-en escucharme can... Tar...

Dije un poco entrecortada, (Y por cierto, mi cara seguía roja).

Ed: ¿Y porqué te lamentas?

Mabel: ...

Ed: Cantas bien, no sé porque te da miedo

Mabel: Cha-chasing cars...

Ed: ¿Perdón?

Mabel: Ese es el no-nombre de la canción... Chasing cars de-de Snow Patrols...

Ed: Ah... Bueno, lo recordaré

Echó una sonrisa, no se por qué. Pero yo también se la devolví sin alzar la cabeza. El seguía apoyado en la puerta abierta mirándome... Nos quedamos unos segundos en silencio hasta que mi padre salió de su cuarto ya vestido.

Papá: Mabel as visto mi... ¡Hombre, Ed! Parece que ya conoces a Mabel. Mabel, este es Ed...

Mabel: Ho-hola Ed...

*Silencio incómodo*

Papá: Bueno, ¿Tu te vas a duchar hija?

Mabel: Eeem... No ahora me pondré el pijama y me iré a dormir...

Papá: Bueno, no tardes mucho... Ed y yo tenemos que hablar de negocios en el despacho de abajo... Si me necesitas ya sabes donde estoy... Venga Ed...

Mabel: A-a-adiós...

Dije aunque sabía que nadie me iba a escuchar. Se dejaron la puerta abierta, así que me levanté a cerrarla, luego me apoyé en ella una vez cerrada y me dejé caer poco a poco hasta quedar sentada en el suelo... "¿Que acaba de pasar?", pensaba mientras ponía mis manos sobre la frente...


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